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EXPERIENCIA
NAVY YARD HOTEL
Brooklyn, Nueva York
El Brooklyn Navy Yard Hotel es el proyecto más multiprogramático de Spearhead. Ubicado en la calle Ryerson, el programa cubre 50,000 pies cuadrados y 360 pies de longitud. Más allá de su uso específico, el proyecto prioriza la experiencia del Navy Yard, combinando diversas tipologías arquitectónicas históricas en un solo espacio, capaz de satisfacer diversas necesidades de día y de noche. Debe ser flexible para acomodar hoteles, salones, spas, bares, salas multiusos, bodas, clubes nocturnos, fiestas, estudios de arte, exposiciones, instalaciones interactivas y más.
INTERIORDISEÑO HOTEL
SUPERFICIE
3150 m2
UBICACION
Brookly, New York
ALCANCE DEL TRABAJO
Diseño esquemático, desarrollo de diseño, diseño interior, renderización en 3D, fase de mobiliario y decoración, y administración de la construcción.
ELCONCEPTO
El mayor desafío del estudio radica en combinar toda esta demanda programática permitiendo que se articule y se separe según el uso diurno y nocturno, manteniendo al mismo tiempo un fuerte sentido de personalidad y diseño atemporal. En un contexto global de diseño estandarizado que el mercado define como trendy, el estudio adopta una postura crítica y se atreve a explorar nuevas experiencias que nos conecten con los aspectos más esenciales y primitivos de nuestro ser.
Para esta tarea, hemos elegido el proceso evolutivo del alma, o como nos gusta llamarlo, el renacimiento: el cuerpo es la punta de lanza del diseño, que enfrenta, en un eje de procesión longitudinal, una serie de transiciones a través de diferentes espacios que conducen a experimentar fases de la evolución humana con sus arquitecturas representativas.
También introducimos una serie de operaciones de diseño basadas en las experiencias subjetivas que la música, como el jazz, el indie pop y la electrónica, nos proporcionó como herramientas de diseño.
THEDESIGN
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ELDESARROLLO
La entrada principal, que comienza desde el nivel subterráneo, sumerge al usuario bajo un espacio semi-cubierto que es una jungla en medio de la ciudad, creando una atmósfera de misterio y diseño atemporal. Este primer espacio interior, "The Club House", rememora los inicios contaminantes del hombre con concreto, ruido, rusticidad y estética gótica inspirada en el Steampunk.
Continuando la procesión, hay un salón con un entresuelo que representa una transición a un mundo más surrealista de finales del siglo XIX, con formas teatrales, drama, deseo y una atmósfera de seducción y elegancia similar a la Belle Époque.
Una vez superada esta "prueba", se llega a la nave central del Navy Yard, "The Spa", donde las personas desechan la ilusión material y se unen en una sinergia. Aquí encontramos columnas de concreto reforzado revestidas con un tejido translúcido en forma de flor que puede cambiar de color, creando atmósferas festivas, tranquilas o tenues flexibles
Los colores crudos, bronce y oro, juegan con las formas y la vegetación colgante para generar una atmósfera cavernosa vernácula, que lleva al renacimiento de lo esencial.
Subiendo al nivel de la calle, encontramos "The Lounge", un espacio meta-humanista de un futuro utópico, encontrando su carácter en el estilo indochino. Estos puntos de partida se refuerzan con herramientas de inteligencia artificial, intentando regresar al principio, despojándose de tendencias materiales y temporales, sumergiéndose en un eclecticismo holístico de las culturas orientales.
El vestíbulo del hotel es una continuación algo más sobria del salón, con colores y formas como protagonistas, y texturas, patrones y mobiliario reducidos al mínimo.
ELRESULTADO
El Brooklyn Navy Yard Hotel es un espacio concebido por y para artistas, para usuarios que buscan nuevas experiencias y sensaciones, para aquellos que buscan conectar. En todos los sectores diseñados, se encontrarán estudios de arte y sus exposiciones, así como las experiencias subjetivas de los usuarios que pasan por ellos, y el programa mutará según sus demandas.
Las atmósferas se apoderan de los espacios, y las personas se apoderan de las atmósferas que el edificio proporciona. El Navy Yard responde a utopías holísticas, sociales, naturales y artísticas, a la comunión de culturas y estilos, que el mercado a menudo estandariza.
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